Es casi imposible separar la Psicología de las pruebas o test psicológicos, lo mismo ocurre en la Psicología Forense, al realizar una evaluación psicológica el perito debe tener amplios conocimientos de psicometría y tests psicológicos. Al momento de planear las estrategias a seguir durante las sesiones se debe ya tener claro y preparado cuales son las pruebas que se aplicaran y sobre todo cual es su finalidad.
Sin embargo, se debe tener muy presente que las pruebas son solo un elemento más en la evaluación a realizar, no el objetivo principal. Querer fundamentar las conclusiones de un dictamen en los resultados de determinada prueba o test psicológico es un error, pues el psicólogo debe unir todos los elementos obtenidos durante la entrevista, la observación, las reacciones emocionales y conductuales y los datos encontrados en el expediente, todo eso se debe analizar en conjunto para poder tener los elementos necesarios al momento de emitir una conclusión.
Ahora bien, las pruebas o tests psicológicos se deben seleccionar de acuerdo a las características del individuo a evaluar, su edad, su escolaridad, sexo, condición sociocultural, etcétera.
Definitivamente no se puede hacer una evaluación psicológica como si se siguiera una receta de cocina. Es un error metodológico querer aplicar siempre la misma batería de pruebas a todos los sujetos a evaluar.
Cada prueba va a tener siempre un constructo teórico, en el cual basa su medición, y por lo tanto se deben tener las bases para poder aplicar determinado test.
Al momento de determinar la batería psicológica que se va aplicar se debe tener presente qué se pretende analizar, como mínimo se aplicará un test de inteligencia, otro de personalidad, uno más para determinar el desarrollo neurológico. Y en el caso de la Psicología Forense algún inventario o cuestionario de psicopatología, el cual será de enorme apoyo para sustentar las conclusiones a emitir.
Existe mucha bibliografía sobre test psicológicos, sus nombres y lo que miden y ahondar en eso ocuparía realizar un blog exclusivo para test psicológicos. Solo basta mencionar a modo de orientación cuales son algunos de los más aplicados:
Para medir capacidad intelectual: Raven, Beta, WAIS, WISC, Terman.
Para detectar posibles disfunciones neurológicas se puede aplicar el test de Bender.
Para analizar rasgos de personalidad se tienen las proyectivas las pruebas de lápiz y papel como Machover, H.T.P, Familia, Bajo la lluvia, las proyectivas verbales de percepción TAT, o tras como las de frases incompletas, Desiderativa y Autobiografía.
Se pueden aplicar también inventarios como el MMPI-2 o el 16FP y además existe una cantidad considerable de cuestionarios que miden trastornos psicopatológicos.
Finalmente se hace la aclaración que los mencionados anteriormente son solo como ejemplo, que pueden o no aplicarse y se puede aplicar algunos otros que no se hayan mencionado. Aquí lo importante es que se conozca muy bien el constructo teórico que hay detrás de la prueba y que se maneje con total profesionalismo los resultados obtenidos de la misma.
1 comentario:
Disculpen tienen más información acerca de este tema?
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